viernes, 18 de septiembre de 2020

La industria del entretenimiento y la agenda política.

Hoy en día estamos viviendo tiempos muy complicados, los errores socio políticos del pasado han desembocado en una serie de vicisitudes que pernean en nuestra sociedad con un sesgo que no tendría de ser; racismo, homofobia, misoginia, y muchas otras injusticias que afectan la vida de millones de personas alrededor del mundo, y han tenido consecuencias mortales. Todo esto es un reflejo de la opresión sistemática de una sociedad conservadora de quienes cierto sector "privilegiado" de la población directa o indirectamente hacen de sus principales víctimas a las minorías que no encontraban una representación que los hiciera sentir orgullo en un sistema tan elitista que muchos de los que ayer fueron oprimidos, hoy ignorados y mañana serán relegados han tenido que pelear por sus derechos más básicos y luchar con el doble de esfuerzo para que pudieran ocupar espacios a los cuales todos merecían aspirar sin importar cuál fuera su raza religión u orientación sexual, porque ningún ser humano está por encima de otro.



Pero la lucha aún continúa y aún cuando ya se ha ganando mucho terreno en áreas que antes difícilmente podrían ser vislumbradas todavía queda un largo camino que recorrer porque ahora las batallas se libran desde desde otros ámbitos, salvo algunas excepciones podemos decir que la sociedad ya está despertando, asimilando estos cambios poco a poco, lo cual ya no permite que el pasado nos represente más, porque ahora en el presente los relegados son otros, aquellos que se rehusan a cambiar su manera de pensar, el sentirse superior solo por haber nacido en cierto lugar y tener ciertas características que antes marcaban la pauta de lo correcto o lo que se consideraba bello ya no va, ahora ellos son señalados y puntualizados a travez de diferentes medios quienes juegan un papel importante en esta nueva revolución humana; poco a poco esta política de lo correcto se va mezclando en nuestra sociedad con lo que consumimos a travez de los ojos y oídos: cine, YouTube, Netflix, Facebook, Twitter, etcétera etcétera todos unidos por una misma meta y contribuyendo a que de manera no muy sutil este mundo acepte este cambio de mentalidad para así poder sobrellevar estos tiempos tan difíciles.

Empatía


Sin duda el mundo que vivimos está lleno de contrastes y los medios de comunicación y entretenimiento no son la excepción pues mientras que por un lado la realidad está superando la ficción, por otro lado la ficción busca emular la realidad. Y no estoy hablando de aquellas obras audiovisuales que ayudadas con tecnología de punta buscan el mayor realismo posible en su apartado visual. No, esto va mucho más allá, cada vez se busca que los personajes sean más humanos, y sus historias más afines a nosotros, para que así nos identifiquemos vivamos junto con ellos sus vicisitudes. El despliegue de lo que se nos presenta frente a nosotros funge entonces como un espejo de nosotros como individuos y como sociedad.

Es interesante como antes los preceptos para regular el entretenimiento se definía de una forma engañosa, era claro que se buscaba complacer al espectador a travez de estímulos visuales; acción desenfrenada sin un trasfondo importante, personajes atractivos pero acartonados cuyos matices solo variaban por el color de pelo y ropa que traían puesta; los hombres eran los héroes, las mujeres solo estaban para ser rescatadas y los demás personajes secundarios servían para llenar una agenda política al mero estilo la "rueda de la moraleja" que los escritores de Animaniacs solo implementaron para darle el gusto a los ejecutivos, quienes estipulaban que todo show "infantil" debía enseñar algo a los espectadores y ser incluyente.



Puede que ahora sea el mismo caso pero por lo menos ahora se hace de una forma más rebuscada y sistemática. Metiendo a personajes multi culturales y dándoles un rol más importante en la trama a fin de justificar su existencia. Aunque a veces se hace de manera forzada y otras de forma bien implementada y más orgánica, todo depende de qué tan creativos sean y que no se nos tome como solo números dentro de una estadística.



Y ahí radica la clave del éxito en cualquier proyecto que se realice, ya que si quieres que algo genere ganancias y llegue al mayor número de personas, tienes que apelar a la humanidad de esas personas, sin embargo esto no es una regla absoluta y a veces suele pasar todo lo contrario.



Muchas veces el público no quiere ser tratado como seres pensantes o consientes de su entorno social, tal vez se escuche mal esto pero las distintas mediciones no dan lugar a pensar otra cosa, recaudación en taquilla, ratings y discos vendidos, evidentemente las personas solo quieren ser parte de algo simple, superfluo y pasajero, el gastar su dinero y tiempo en algo que los satisfaga un rato y les haga olvidar la monotonía sin que les aporte gran cosa a sus vidas es algo tan común como comerse una hamburguesa a sabiendas de que te provocará gases. Por algo existen franquicias tan exitosas como Rápidos y Furiosos, por algo Bad Bunny ganó este año el título a mejor compositor (Como si el 2020 no fuera lo suficientemente horrendo). Así que no desechemos el factor humano de equivocarnos sobre todo cuando se trata de emitir un juicio y entendamos que ciertas tendencias nunca van a acabar como así como las polémicas que provocan.

Y hablando de polémicas


Recientemente ha sonado mucho la polémica suscitada por el Videojuego de nueva generación The Last of Us II, secuela de un juego que sorprendió a muchos por su narrativa y apartado gráfico, por lo que su continuación no podía quedarse atrás, para muchos lo logró y para otros les dejo un mal sabor de boca, el problema vino tras su salida, pues mientras que la crítica especializada lo alaba el jugador promedio lo detesto, otorgándole una calificación que raya en lo absurdo y ha suscitado un montón de burlas en redes sociales, a través de memes comparándolo por ejemplo con el desastroso juego de ET quien dicho sea de paso casi acaba con la industria de los videojuegos y resulta que este superó en calificación de la audiencia a este juego.

¿Por qué ocurrió esto?

  • ¿Hay algún plan maquiavélico para desvirtuar el trabajo de Naugthy Dog la compañía realizadora de la franquicia? ¿O simplemente es tan malo como se dice?

  • Aquí habría que considerar varios factores:

  • Aún con todo y mala crítica el videojuego es un éxito comercial y ya ah roto algunos récords.

  • Paralelamente en varias páginas de compra venta han visto un aumento considerable en la oferta del juego como venta de segunda mano.


  • Esto da a entender que muchos de lo que lo adquieren terminan por lo abandonarlo ya sea que lo completen o no.

  • El juego de buenas a primeras cuenta con una pareja lgtb y personajes multi culturales con diferentes roles importantes en su trama.

  • Eso suscitó varias burlas por usuarios de internet quienes lo acusaron de inclusión forzada.

  • A nadie le consta esto pues los realizadores solo se encargan de dejar en claro qué roles realizan y cuáles son sus preferencias dentro de la historia.

  • Por otro lado luego de ver el gameplay del juego puedo decir que tal parece como si los escritores odiaran a sus personajes y tienen un retorcido sentido del humor para con su publico consumidor al presentarnos a personajes y sus historias a fin de que nos encariñemos y luego tratarlos como un costal de papas que estorba en la entrada de su casa. Y es que suena malsano que el juego te obligue a jugar con un personaje que fue introducido con el único propósito de joderle la existencia a los personajes principales y luego te haga sentir empatía por este para luego hacer que ambos entren en conflicto torturando psicológica mente al jugador

Pero sin duda en nada ayudan algunas declaraciones como la emitida por su director, minimizando el aspecto de diversión y maximizando el de "atracción", sin duda esto rompe con todo el esquema del origen y propósito del entretenimiento en sí. ¿Está en lo correcto al afirmar esto?


“Nosotros, específicamente en The Last of Us (Uncharted es un poco diferente en cuanto a nuestra aproximación creativa) no utilizamos la palabra diversión. Lo que decimos es atractivo, y si bien esto puede parecer una diferencia pequeña, para nosotros es importante”.

Neil Druckmann

¿Arte Pretencioso?




Cuando el entretenimiento ha dejado de ser eso y pasa a ser un medio de expresión el factor de diversión pasa a segundo plano, llevándose el apelativo de pretencioso, y bajo ese precepto muchos pueden decir que es incomprendido, pero para la mayoría se siente que algo no cuadra, ¿Se vuelve propaganda barata entonces este tipo de expresiones creativas? Se entiende por autoritarismo se busca imponernos algo en este acaso la agenda política lo cual termina con un hartazgo social, esa tendencia de meter personajes y situaciones fuera del contexto de la trama, cambiar la etnia e incluso el sexo de algunos personajes ya establecidos solo porque la ley no escrita de la inclusión así lo dictamina cuando no hay una justificación que nos haga sentir como algo natural estas adaptaciones, comprometen el mensaje de aceptación y empoderamiento que se quiere dar en un principio. Les pasó a Las Cazafantasmas y las las nuevas Ángeles de Charlie y a infinidad de personajes que fueron etiquetadas con la marca del fracaso comercial.

Pero claro cuando todo sale mal culpa a otros.



Al parecer hay ciertas culpas que se quieren pagar debido a errores del pasado pero también hay deseos de capitalizar esta tendencia, lo que siento desvirtúa el movimiento y todo medio de protesta por hacerlo real y justificado, haciendo que se vea más como una moda en donde el bombardeó de información mediática es tal que llega al hartazgo en consecuencia viene el rechazo y bajas ventas las cuales los realizadores no tienen empacho en acusar al machismo, racismo y homofobia de ser los causantes más nunca van a aceptar que quizás incurrieron en fallos argumentales y toma de malas decisiones.



Y luego vienen otros fanáticos a justificarlos aseverando que uno no entendió lo que el autor quiso dar a entender cancelando así tu opinión como cancelaron a Victoriano Huerta en una efeméride mal hecha donde lo confundieron con Francisco y Madero y en lugar de aceptar el error salió el secretario a justificar que Victoriano Huerta no merece que se difunda su imagen por ser un personaje negativo para la historia de México.

Rompiendo esquemas

¿Está la sociedad realmente evolucionando?



Pensemos en una actriz o actor que tuvo vocación y entró en el negocio porque quería interpretar diferentes papeles ya sea una licuadora o una persona de color y ahora se tiene que ver limitado por sus rasgos, espera eso le pasó a muchos como Danny Trejo o Yalitzia Aparicio y esto no tiene que ver la raza, The Rock siempre hace el mismo papel y todos estamos de acuerdo en eso llenando las salas donde se exhiben sus películas ahí radica la clave en todo esto, los límites se los tendría que poner uno mismo no la sociedad así como Tommy Wiseau hizo su película The Room a sabiendas de que todo mundo le dijo que no era actor irónicamente fue la sociedad la que se encargó de darle su lugar en la industria del entretenimiento después de todo el sol sale para todos pero no todos eligen asolearse.



La gran causa se desvirtúa

A mayor diversidad mayor posibilidad de que se genere desconcierto, y es que en la variedad de ideologías aumenta la posibilidad de que los conflictos se acentúen debido a que la libertad de pensamiento propiciaría a que otros quieran imponer su ideología y con esto se generarían roces, y salgan los oportunistas a capitalizar esta causa, solo basta con que algunos de estos movimientos se cuelguen de la protesta para sacar provecho de una forma nociva como es el caso de los pedófilos que se están colgando del movimiento LGTB para buscar la normalización de sus perversas tendencias, así pues en la variedad está lo complicado y lo conflictuado de la sociedad.



Al reasignarle una orientación sexual a un personaje ya preestablecido se logra que se hable de este pero a expensas de crear una discusión innecesaria derivando en un conflicto donde antes no lo había, pues el personaje no lo necesitó para darse a notar, ahora parece ser una regla que algo como su preferencia sexual tenga peso sobre el personaje y de ahí se derive todo su desarrollo tal es el caso de Shera en su nueva adaptación de Netflix o Velma que en su concepto original era una chica inteligente emancipada del cliché de damisela en peligro como lo era Daphne y ahora con las declaraciones de los productores afirmando que es lesbiana la vienen a convertir en otro cliché.



Generando una generación de cristal


¿Recuerdan como antes decían que los niños debían jugar con lodo porque así creaban defensas y para muestra evidenciaban a los niños sobreprotegidos que resultaban bien enfermizos? Podría ser que ahora por ello tenemos una "sociedad de cristal" porque ya no quieren exponernos a las cosas malas que permean en la sociedad desde tiempos inmemoriales ahora resulta mejor hacerlas a un lado y ignorando que existen y eso es peligroso.





En verdad que esta generación está siendo sistemáticamente condicionada a quejarse porque así se les ha enseñado que se consiguen las cosas, sin un mérito personal, el colectivo es el que lo hace todo por ti. Ejemplificando esto, antes te vendían un juego sin instructivo y te retaban a pasarlo por tus propios medios, con tu ingenio y sentido común descubrías nuevas formas de lograr avanzar, con paciencia y perseverancia lograbas superar la frustración de fallar una y otra vez para que la recompensa fuera tu propia satisfacción personal de haberlo conseguido por ti mismo, en cambio hoy en día si un videojuego no incluye un tutorial para indicarnos cuál es el botón de saltar se está arriesgando a ser demandado por un usuario y eso en verdad es una pena.

Libertad de expresión o discurso de odio.

Hay veces que la línea entre libertad de expresión y discurso de odio parece ser muy delgada y a medida que pasa el tiempo está se va disminuyendo.



Estamos llegando al tiempo en que hoy en día no importa quién eres o de dónde vienes ni lo que hayas hecho bien, ya no puedes opinar de nada en absoluto por temor a ser tachado de intolerante y ser víctima de la censura por parte de los mismos que luchan en contra de la discriminación e intolerancia, es ilógico en verdad pero así le está pasando a infinidad de comediantes, escritores y figuras públicas, porque la gente de piel sensible vuelca sus frustraciones en quienes no piensan o pensaron igual a ellos, les dan nombre y apellido, les ponen apelativos atacándolos en las redes sociales, reportan sus cuentas en redes sociales con ciber ataques y mensajes de odio para darlas de baja o obligarlos a que ellos mismos las den de baja, los denuncian con las autoridades de su país y agranden personalmente en la calle e incluso sus domicilios, todo para cancelarlos, y el acoso va mucho más allá, violentando su legado, dañan sus monumentos, queman sus libros, discos o películas, les hacen malas reseñas en sus películas o videojuegos y luego se quejan de que Rotten Tomatoes los censura al bajar sus reseñas porque incurren en discurso de odio al meterse directamente con el artista; que independientemente de que tipo de personas sean en realidad no tendría que ponerse en entredicho la calidad de la obra en la que participan o su interpretación de la misma, después de todo ¿Porqué se van en contra de una persona cuando muchos exponentes del pasado hasta el día de hoy se les recuerda por su genio artístico por sobre su misoginia, violaciones y abusos? Pero tal parece que no son justos con los artistas de ahora que por expresar su opinión personal en temas actuales tan delicados como lo es la identidad de género o afiliación política se ven sometidos al escarnio de los haters que les da igual si dijiste algo que no los afecta directamente y aunque afectara inclusive a un solo individuo y a nadie más, no tendría porqué maximizarse al grado de pedir que se le cancele para que nadie pueda acceder a sus obras, ¿Dónde queda entonces la libertad de elección? Tal parece que hoy por hoy ya nadie tiene el beneficio de la duda o es merecedor de una segunda oportunidad, aún cuando te disculpes, aceptes el error y prometas ya no cometerlo, sigues siendo culpable de un agravio equiparable al crimen de un asesino o violador.

Atracción por lo prohibido

Y es que aparentemente el odiar por odiar es la nueva forma de entretenimiento, los haters se alimentan de el y a su vez varios medios se nutren de los que lo producen, de otra forma no me explico porqué hay gente que invierte tanto tiempo en ello. ¿Qué ganan con insultar a compañías como Disney o a comediantes como Chumel Torres? ¿No basta con ignorarlos? ¿No se darán cuenta que entre más hablan de ellos más exposición les dan y la gente más quiere verlos? A estas alturas ya deberían de aprender de los errores de la iglesia que cuando se trata de censurar algo o prohibir algo que atente en contra de sus creencias ya sea una película o obra escrita más publicidad gratuita le dan tal fue el caso de obras como El código Da Vinci, La pasión y El crimen del padre Amaro.



Todos somos caemos en el juego mediático, somos parte de el sin siquiera saberlo, nuestros semejantes nos alientan a buscar más pero también nos restringen de lo que ellos consideran nocivo.



Lamentablemente el llegar a un consenso en el que todos se beneficien suena imposible siempre habrá inconformidades de cualquier índole, mientras la mayoría dictamine el éxito comercial de cualquier proyecto ya sea económico, religioso o político quienes lo pagarán caro son la minoría, y no necesariamente grupos vulnerables, también habló de que pueden ser aquellos a quienes por ejemplo no les gustan las películas dobladas y se ven sometidos a tener que verlas porque las leyes en su país establecen que todas las películas extranjeras tienen que ser dobladas, y como está conforme con esto entonces les toca elegir por los demás y marcar la tendencia de lo que es permisible, más esto claramente no garantiza la libertad de elección que debería ser un derecho fundamental.


Escoge tus peleas



Que ideal sería que nos respetáramos entre todos (Excepto a los pedófilos a ellos no por indeseables, miserables y sin vergüenzas), así tal vez podríamos aspirar a una sociedad mejor conformada y más tolerante; lo he dicho siempre: el cancelar algo solo porque unos creen que atenta en contra de su ideología es rehuir del verdadero problema de educación y falta de valores en las personas, aumentar las leyes para definir una postura por encima de los principios de libertad de expresión y elección tampoco es la solución, ya esta comprobado que no resuelve en lo absoluto ponerle etiquetas e imágenes fuertes a los productos altos en grasas saturadas o cajetillas de cigarros si la indiferencia de las personas es lo que está matando a la sociedad poco a poco estrangulándola hasta crear un nuevo malestar social, como seres pensantes y con sentido común deberíamos saber elegir nuestras batallas y haciendo caso omiso a aquello que solo concierne a los involucrados eso se logra con educación, porque por muy fácil que sea pasar de lo que nos molesta a muchos les cuesta respetar y seguir su camino, dejemos de crear nuevas problemáticas; sobre todo en asuntos como lo es el entretenimiento porque al final el cine de autor y el cine comercial es entretenimiento y a cada quien el cine lo nutre como le viene en gana, pero siendo realista sé que los cambios se están dando y muchas veces de manera forzada, y sí el lenguaje inclusivo se va a dar aunque de manera forzada y no orgánica como suele ocurrir pero ¿para que enojarnos de momento? Entonces lo ideal es aceptar lo que no puedes cambiar y en lugar de eso cambiar tu para seguir con tu vida sin enfrascarte demasiado en cosas que no nos perjudican en nuestra libertad de elegir las causas por las que vale la pena pelear y cuales ignorar. Solo quizás podamos ejercer un cambio.





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